The Identificator

Ya sea por mi mitomanía freak o por simple facilidad fisonómica, el caso es que identifico a la primera a la gente famosa y medio famosa cuando me la cruzo por ahí. Esta última semana he dado buena muestra de ello identificando a gente que nadie identificaría.

Ayer vimos B y yo a los raperos de La Casa de tu Vida en el Mercado de Fuencarral. No tiene mérito, lo sé, pero es que no he seguido nada, pero absolutamente nada ese concurso... y fui capaz de identificar a la primera a la novia de uno de ellos, a la que he podido ver por la tele unas dos veces y sin mucho interés. Por cierto, que los dos pives esos iban vestidos como para meterles cuatro hostias a cada uno, especialmente uno de ellos, el primer rapero de la historia con ropa como de raso en tonos blanco y ¡rosa palo! Terrorífico, no os haríais una idea cercana si no lo viérais.

Ayer, además, me crucé en el metro a Yoshío, concretamente en Antón Martín. No sé si os acordareis de él, pero era el japonés que salía en Lo + Plus haciendo remedios para todo con frutas y verduras. Era un japo de frente despejada al estilo japonés (esa alopecia a lo Mao tan chinorri), muy moreno, bastante gracioso y amanerado como él solo. También hacía masajes raros y se reía histérico. Y a la primera, fue verlo y emocionarme. Porque esa es otra, cada vez que veo a un medio famoso (incluido Juanito Navarro, al que vi no hace mucho en un autobús) me emociono.

El otro día estábamos de copas y supe quién era un tío que no sé ni cómo se llama y que vi una vez en una entrevista. Se trata de un paralítico de una asociación por la dignidad de los discapacitados que salió en el programa de Julia Otero criticando que Ramón Sampedro fuera un ejemplo. Me pareció un tío brillantísimo, que exponía las cosas con mucha pasión y argumentaba muy bien, me dieron ganas de acercarme y decirle que es un crack, pero no había bebido lo suficiente. El caso es que el tío había cambiado ligeramente de look y aun así supe quién era. CPNB flipó con que supiera quién es.

Por alguna razón, identifico a la gente. Hace muchos años, cuando curraba vendiendo donuts, apareció una chica que salía en Al Salir de Clase. Jamás vi un capítulo ni siquiera cinco minutos seguidos (y mira que me arrepiento), pero apareció esa chica y le dije a mi compi: "Ésa es de Al Salir de Clase", y ella me dijo el nombre del personaje que interpretaba. Era Pilar López de Ayala. Ahora sí que me sé el nombre.

El Mundo de Quic, el Mundo de Quic. Marcha marcha, es genial.