Cosas que yo me pregunto (3)
Se me saltan las lágrimas del sonoro éxito que está siendo esta serie. Prosigo.
PREGUNTA 3
- ¿Por qué cuando le cedes el asiento a una vieja en el metro siempre te dice que no y a las dos décimas de segundo se sienta? Este espectacular enigma daría, seguro, para un tomo de los gruesos de antropología, porque algo hay ahí que no comprendemos. Tengo dos teorías: A) que a esas edades ya echan de menos decir que no cuando queren decir que sí o B) que, por principio, todo lo que diga un joven está mal y ha de ser rechazado, por lo que les salta el resorte de refunfuñar y lo que tardan en sentarse es el tiempo que su cerebro emplea en procesar que les estás haciendo un favor. ¿Alguien mejora estas teorías?
El Mundo de Quic, el Mundo de Quic. Marcha marcha, es genial.
posted by Quic @ 1:50 AM
4 Comments:
la primera teoria me ha encantado, pero dudo que sea cierto, yo con la edad me vuelvo más y más salida, así q las viejas no deben atreverse a decir no cuando quiren decir si, no vaya a ser que las contesten: "pues vale, mejor pa´mi", así que me decanto más por la segunda, aunque si tuviera que exponer yo mi teoría, diría que no quieren sentarse por si tienen que colarse, creo que sólo viven para eso, sueñan con colarse en la charcutería , en la caja del super.., y luego cuando se reunen con las amigas presumen sobre lo mucho que se han colado.
Y que porq se sientan al final?, porque piensan, ja, mira ahí va una gorda embarazada, mejor me siento yo y me cuelo,ja.
mari-ici
el dia que tengas un blog y cuentes tus numerosisimas anecdotas, entonces,
yo seré tu fan numero uno
besos
No tengo ni idea. La fauna viejística en el metro es variopinta, pero muchísimo menor que la fauna viejística autobusera. Ahí ya es que te meas y no echas gota.
El mejor ejemplar fue ése que llegó en un 19 repleto, se fue derechito a los asientos reservados y le dijo a un joven aposentado: "Eh, tú, fuera de mi sitio".
¿Y no es posible que las gentes de la tercera edad, o afroviejos, tengan lenguaje propio, igual que los niños? Porque los niños, vive Dios, tienen lenguaje propio; y, si no, que se le hinche la cabeza a Lucho.
No es la primera vez que se dice que la senectud no es más una vuelta a la infancia, pero envuelta en canas y arrugas.
Por ahí resulta que, en lenguaje afroviejo, "no" quiere decir "sí", y es además una palabra que no viene del latín, sino del sánscrito.
Vaya Ud. a saber. Uno es de ciencias y ni puta idea, oiga.
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